¿Crímenes? ¿Por qué crímenes?

¿No habéis reparado en lo poco que se espera que hagamos en el mundo actual? Es como si la gente aspirara a decírtelo todo en todas las situaciones, qué debes hacer, qué debes sentir, qué debes pensar... en definitiva, a destruir tus propias decisiones, emociones y pensamientos. Cualquier acto de protección de éstos, por inofensiva que sea, parece un crimen imperdonable, y así es como yo, tú, y otros seres curiosos y despiertos, nos volvemos delincuentes.

domingo, 4 de noviembre de 2012

El villano de la historia

¿Ninguna vez te ha pasado? Sí, te lo digo a ti, ahora que estás leyendo esto. ¿Podrías decir que en ningún momento te apiadaste de algún villano, pensases que no merecía estar allí, que su castigo era injusto? A veces nos apiadamos de los villanos, es algo normal, creo. Al fin y al cabo, muchos villanos son algo más que seres sin escrúpulos que buscan moldear el mundo a su imagen y semejanza y torturar y asesinar horriblemente a cualquiera que discrepe. Muchos tienen una historia, una cadena de hechos que los habrá hecho llegar hasta ese punto en el que se pasa del bien al mal. Y a veces puede que te parezca que eso no basta para condenar al villano de turno. Que ese no es su lugar, que la balanza de la justicia ha vuelto a desequilibrarse, que no se merecía el castigo al que es sometido.

A mí al menos me ha pasado, no sé si es un problema mío o no. El caso es que, una vez más, la realidad supera a la ficción, y la vida real está sembrada de individuos que son castigados como criminales, terroristas, agitadores, o incluso monstruos (en sentido figurado) y herejes. Y entonces, puede, sólo puede, que alguno de estos pobres diablos te parezca merecedor de compasión, de respeto, o incluso de aprobación. Y entonces piensas: ¿por qué eres el malo?

Y desde ese preciso momento, todo el vórtice de información que puedas recibir sobre el susodicho sujeto deja de tener sentido, se está siendo exageradamente cruel con alguien, ya sea culpable o inocente, y el mundo en que vives y que (normalmente) aprueba la sentencia roza ya la villanía que pretende erradicar.

Y al final, algunas personas van más allá, y analizan de este modo, no ya a una figura de ficción, a un personaje histórico, o a alguien que ha salido en los periódicos o la televisión. Algunas personas acaban mirándose a sí mismas y a lo que las rodea. Y entonces, empiezan los verdaderos problemas, porque no puedes imaginarte de  buenas el rol que alguien de tu entorno cercano puede tener, y cuándo puede que cambie inesperadamente de papel.

Y una vez estás ahí, ¿no te ha pasado alguna vez que en algún momento de la historia, tú has sido el malo? ¿Y no has sentido alguna vez que te juzgaran como si lo fueras, sin que hubiera malicia en las acciones que acarrearon el castigo, y que la crueldad del mismo es desproporcionada?